La combinación entre el lifting y la cirugía de párpados

25 Ene La combinación entre el lifting y la cirugía de párpados

El lifting facial es una cirugía muy habitual en pacientes que desean rejuvenecer su rostro, y sin perder expresividad. Pero en muchas ocasiones se combina con otras técnicas para lograr una corrección más completa, como sucede cuando además del lifting se realiza una blefaroplastia (cirugía de párpados). Estas dos intervenciones, en conjunto, hacen que la cara presente un aspecto mucho más joven. Mientras el lifting aborda las arrugas y la flacidez facial -así como de la mandíbula y el cuello-, con la blefaroplastia se elimina el exceso de piel en los párpados caídos. Y, además, reduce notablemente las bolsas bajo los ojos si el especialista también trabaja esa zona. Todos estos motivos hacen que la combinación entre el lifting y la cirugía de párpados sea una opción muy demandada.

Objetivos y resultados de un lifting

Un lifting en el rostro permite rejuvenecer de forma natural y armoniosa. No se trata simplemente de un estiramiento de la piel, como muchas personas aún piensan. El cirujano redistribuye los tejidos a la vez que tensa la piel. La finalidad es disminuir al mínimo los pliegues y las arrugas de la cara, pero en un tratamiento global que busca el equilibrio estético. Por tanto, un experto en lifting facial puede revertir el “desdibujamiento” de los rasgos faciales a causa del paso del tiempo, aunque normalmente no se practica en pacientes de menos de 45 años.

El lifting, en consecuencia, es una buena opción para aquellos pacientes que buscan una mejora significativa y duradera, pero artificialidad. Recordemos que las infiltraciones (ácido hialurónico, neuromoduladores o grasa propia, por ejemplo) tienen fecha de caducidad y se pueden necesitar retoques para mantener los resultados obtenidos. Sin embargo, el lifting facial es permanente, aunque hay que tener en cuenta que esta intervención no nos «ancla» en una determinada edad; aparecerán nuevos signos de envejecimiento natural en el futuro. Estos, no obstante, se pueden ir tratando con tratamientos de medicina estética antiedad.

La mirada tras una blefaroplastia

La blefaroplastia o cirugía de párpados puede mejorar la apariencia general de los ojos. Por un lado, con esta operación se retira la piel sobrante de los párpados, que suele ser sinónimo de una mirada cansada y envejecida. Unos párpados muy caídos pueden caer sobre las pestañas, y ello tiende a acentuarse en la parte lateral opuesta al lacrimal, provocando un gesto triste. Esta alteración, bien genética y/o por el simple hecho de cumplir años, se puede solucionar con la blefaroplastia. Siempre buscando la naturalidad.

Pero una cirugía de párpados puede no centrarse únicamente en reducir la piel de los párpados para que desaparezca esa apariencia caída. Porque la segunda aplicación de la blefaroplastia consiste en extraer la grasa de las bolsas, y si es necesario también el exceso de piel que hay en ellas. De esta forma, si bien no se tratan las ojeras como tal, se «aplana» el área de las bolsas.

Fusión de técnicas para un rejuvenecimiento total

La combinación entre el lifting y la cirugía de párpados sería necesaria en pacientes que necesitan un plus de juventud en la zona ocular, ya que los párpados y las bolsas no se pueden mejorar solo con un lifting. Ambos procedimientos, que se pueden llevar a término en una misma cirugía, son complementarios. Por un lado, el lifting hace que las arrugas se alisen y el descolgamiento facial se minimice, mientras que la blefaroplastia hará que los párpados se resitúen (al quitar la piel colgante que sobra) y las bolsas se reduzcan de forma muy notable.

El hecho de restaurar la apariencia de la piel alrededor de los ojos, unido a los efectos del lifting facial, hace que la combinación entre el lifting y la cirugía de párpados sea un acierto en personas de edad avanzada, o que sin haberla alcanzado, ya presentan unos signos de envejecimiento facial y periocular muy claros.

Lo que verás ante el espejo si decides apostar por una intervención combinada de lifting y blefaroplastia es una piel tensada y sin flacidez, a la vez que unos ojos sin bolsas abultadas ni párpados débiles y caídos. Esta corrección integral de la cara contribuye a ese rejuvenecimiento total deseado.

¿Me quitarán también las patas de gallo?

¡Atención! La mejor forma de tratar las patas de gallo sin entrar a quirófano es un tratamiento de neuromodulación, donde se practican suaves inyecciones de una sustancia que trabaja contra las arrugas provocadas por el movimiento muscular. Por el contrario, si te sometes a un lifting esto ya no sería necesario, ya que en el lifting facial se puede incluir esta zona.